Me ha emocionado¡¡¡es tan dulce y humano tu amor por el pájaro…¡¡¡
y es tan, dulce y humano el amor del pájaro por tí…¡¡¡
Un abrazo con alas de pájaro…¡ me gustaría ser pájaro…..¡
El pájaro, amiga Montse,
es ruiseñor, gorrión, jilguero…
quizá también es emoción;
las noches de más frío viene,
a veces se espanta por los ladridos de la perra,
o por la luz que se enciende…
pero a la noche siguiente, vuelve,
pues aquí tiene calor.
Abrazos
«Querido hermano poeta Justi,
este es un post maravilloso
que nos trae la primavera.
Sabes querido amigo?, una de las cosas que me gusta de
China es que el año nuevo se celebra siguiendo el calendario lunar.
El proximo 14 de febrero se celebra la entrada del año,
que coincide basicamente con la primavera, pues aqui ya empiezo
a ver tambien
a los pajaricos que vuelven.
En mi opinión, el poeta es la voz de los pajaros en la tierra,
nosotros no tenemos alas, por eso le damos las palabras.
Un beso y feliz primavera,
Popochan.
———[ 받은 메일 내용 ]———-
제목 : Hola
날짜 : 2010년 2월 09일 화요일, 오후 21시 46분 49초 +0900
Hola Pop,
supongo que preparando ya la fiesta del Nuevo Año Chino.
Aquí, para la primavera,
todavía quedan unas cuantas heladas,
vientos
y lluvias frías.
Como dice la poesía china:
«En las noches de primavera
no se advierte el alba.
Hasta que por doquier resuena
el reclamo de las aves.
Pero anoche oí el estruendo
del viento y la lluvia
Y me pregunté: ¿cuántos tallos de rosas
se habrán dañado?»
Gracias por tus palabras.
Un abrazo, y feliz año.
Justi
qué sensibilidad demuestras hacia los animales…hacia ese pájaro que año tras año regresa a casa..al calor del hogar en donde sabe que será bien recibido y que no pasará frío. Es como la golondrina, que año tras año vuelve a realizar un nido bajo el alero de las casas…Es cierto que no sabemos a ciencia cierta, o no lo vemos, en dónde duermen los pájaros…en mi casa…lo hacen en la cochera y se comen el pienso del perro…así que cada mañana les pongo de gato, que es más pequeño…y mejor de llevar…Somos aves, que emigramos a otros lugares…pero casi siempre regresamos al lugar en donde se nos trata con cariño…un besito
Bonitas palabras, Águeda,
somos pájaros, y somos aire
y somos montaña, depende de la mirada…
Me has hecho recordar cuando años atrás teníamos el pastor alemán fuera, y alrededor de su pienso había siempre un grupito de gorriones…y demás bichejos. Había concordia y reparto entre ellos…siempre cada uno a su horario; !buena gente!
La verdad que sí, que el relato va de pájaros y de emociones que buscan donde pasar la noche de los inviernos hasta que sus cantos y alas desplieguen la primavera. Que nunca falte el calor.
Un abrazo.
Preciosas tus palabras Justi, palabras rebosantes de sensaciones, de emociones de buenos sentimientos, bellas y cálidas. Tan cálidas como la tubería donde se protege el gorrión.
Sin calor no hay vida, ¿verdad, poeta?
Un beso grande.
La verdad, Carmen, que parece gorrión. Tampoco lo he podido mirar de frente, al resplandor de la linterna, pues se iría como sucede a menudo.
(Tampoco es mi fuerte el dominio de este tema de los pájaros, otra asignatura pendiente.)
De noche se le ve rechoncho, con el pico grueso adaptado para comer en estos terrenos de montaña. Los colores de las plunas parecen grises y marrones.
A veces viene otro, más estilizado, que no sé si será gorrión o de otra especie o pueblo. Tendré que investigar…
Y como sin calor no hay vida, quizá por eso vienen cuando hace más frío hasta las tuberías de la calefacción, donde se posan para pasar las noches.
En noches más cálidas no vienen, tendrán otros balnearios…
Vaya disertación estoy dando, ni que fuera yo entendido en pajaritos…
Pero me encanta que en cada invierno vengan a compartir nuestro calor.
Y que yo sepa, estamos hablando de emociones cuando estamos hablando de gorriones.
Gracias por tus pálabras, y ciertamente como dices:
SIN CALOR NO HAY VIDA.
Besos.
Cada una de las frases me provoca una imagen.
Mi casa no es una casa solitaria, conmigo habitan aquí muchos pájaros, gorriones sobre todo, han anidado en la cuadra y cada mañana salen a picotear las plantas y a robarle el pienso al chucho que corre tras ellos ladrando, como si de un juego se tratara, porque, otras veces, los deja comer de su plato mientras domita.
Dejaremos una ventana abierta siempre para que entren nuevas emociones y tendremos preparadas unas risas para alimentarlas.
Un abrazo, amigo.
!Vaya! todos estamos rodeados de pájaros, gorriones, jilgueros…
amiga Gloria.
Con ellos vienen y revolotean las emociones, entre cuyas alas se enredan .
Como bien dices, abramos puertas, abramos ventanas,
y que entre la naturaleza…
«Bajan de nueva cuenta hasta el jardín,
bajan en grupo, solos, en parejas
en busca de semillas o de pan,
de agua fresca, de frutos o de insectos
pero los amilana una mirada.
Siguiendo los atávicos auspicios
de su naturaleza, los gorriones
alzan el vuelo y tímidos se posan
en los cables de luz como si fueran
las notas de un pentagrama.» (Alberto Blanco)
Un abrazo.
Me ha alegrado tu comentario, y al oscurecer,
la hora en la que viene el gorrión cada noche buscando ese hueco que has visto en la foto. (Me costó sacarla sin que se fuera. Es esquivo a la luz del flasch,
a las miradas como dice el poeta).
Justi
“Es invierno, llueve y hace frío; él es libre,
pero sólo aquí siente el calor”
dicen que los pájaros llevan una herencia genética
que hace volver a sus descendientes
al mismo sitio…
como ese pájaro que te visita año tras año…
que recuerda el calor bajo el alero
en las frías noches de invierno.
Es como la ilusión que se renueva cada año,
que anida en los corazones cálidos
y le cuesta irse…
que cuando flaquea
vuelve buscando el calor,
quizá porque la libertad no es importante
sin una emoción, sin un sueño,
como tú dices en este lindo poema…
Tantos pájaros que nos buscan…
que esperan el desayuno por las mañanas,
a mi me vienen a primera hora, y hasta entran en la cocina
entre trinos y revoloteos de ramas todavía en sus alas,
comen migajas que les doy…
luego se van y siempre vuelven…cada mamana.
Son esos sueños
que llenan nuestras noches…
que se acurrucan en nuestro corazón,
que van y vienen,
mezclándose con realidades…
¡Qué bonita historia, Justi!
los pájaros anidan donde encuentran una sonrisa…
en forma de calor y alimento…
Un abrazo.
Estrella
Pues será lo de la herencia genética…
Gracias por la aclaración, Estrella.
El caso es que desde hace años sigue posando,
en las noches de invierno, y en ese lugar, el mismo pájaro (el mismo o mejor dicho su heredero genético)
Bonitas palabras las tuyas, que siguen en el mismo vuelo del texto.
Son estampas típicas del invierno.
Esto es montaña baja, húmeda, hay el cauce de un arroyo.
Y muchos pinos…
Los pájaros grandes, las urracas, las torcaces, vuelan lejos,
pero los pequeños gorriones, tan débiles como tiernos,
cuando llega el atardecer buscan refugio en los árboles más cercanos a la casa, lejos de la carretera y de la curva del arroyo.
En esa hora crepuscular, en el laurel hay cantos y bailes de plumas,
la noche penetra entre las ramas, (también el frío),
y siempre el mismo pájaro que busca la tubería de la calefacción
para dormir. Prefiere sentir el espacio de una casa, alejado de los suyos,
sentir sus emociones entre paredes blancas y cálidas.
Es la escena de cada noche fría, y este año hay muchas…
Es buen augurio, pues como digo en el texto, en sus plumas anida la primavera
que luego, ya en marzo, brotará en rosales.
Gracias por tus palabras, veo por lo que dices que también
te visitan. Que no les falten migajas de pan en tu cocina, o en tu mano.
Te traerán coloridas primaveras…
Besos
Hola Justi, el texto no puede ser más bello…
sí que está cargado de poesía…de emociones…de imaginación…
Los poetas sois la releche…
Menos mal que Zar apunta por ahí una idea más lógica…porque eso de que todos los años es el mismo pájaro…jejeje…
Me gusta mucho la métafora. Caro que sí. Todos, gorriones y personas, acudimos al “calor” que calienta las tuberias y…al calor humano en sus diversas manifestaciones…
!vaya!… Otro comentario que me da caña con lo del MISMO pájaro…
Gracias, Lola, por tus amistosas palabras.
La verdad que no soy experto en Pajarería, tampoco en temas de Reencarnación, pero seguro que debe ser así como decís, aunque poéticamente queda más bonito eso de:
mismo tejado,
mismo alero,
mismo techado,
misma casa
y un mismo pájaro…
(Es proverbial la tendencia que tienen los malos poetas-yo no llego ni a eso- a desfigurar la realidad)
Así que…!vale! admitido científicamente que será otro gorrión,
pero para mi será el mismo gorrión,
sempiterno y lastimero gorrión…
símbolo de la necesidad de la comunicación que todos tenemos en las noches de invierno.
Un beso.
Justi
Lo importante es como tu lo veas, y como gran poeta que eres lo «ves así»…Rafael Alberti los ve en el mar…
A fin de cuentas Justi, lo importante es «volar»….
A volar
Leñador,
no tales el pino,
que un hogar
hay dormido
en su copa.
—Señora abubilla,
señor gorrión,
hermana mía calandria,
sobrina del ruiseñor;
ave sin cola,
martín-pescador,
parado y triste alcaraván:
Bonita esa canción marinera de nuestro admirado Alberti.
Gracias, Lola.
Yo pondré esta otra de Pablo Neruda, titulada… PÁJARO PABLO:
«ME llamo pájaro Pablo,
ave de una sola pluma,
volador de sombra clara
y de claridad confusa,
las alas no se me ven,
los oídos me retumban
cuando paso entre los árboles
o debajo de las tumbas
cual un funesto paraguas
o como una espada desnuda,
estirado como un arco
o redondo como una uva,
vuelo y vuelo sin saber,
herido en la noche oscura,
quiénes me van a esperar,
quiénes no quieren mi canto,
quiénes me quieren morir,
quiénes no saben que llego
y no vendran a vencerme,
a sangrarme, a retorcerme
o a besar mi traje roto
por el silbido del viento.
Por eso vuelvo y me voy,
vuelo y no vuelo pero canto:
soy el pájaro furioso
de la tempestad tranquila.»
Al final, la metáfora del pájaro… vuela
y se cobija en cada uno de nosotros.
Un abrazo.
Justi
Pues si Justi, todos pudimos comprobar alguna vez y lo hacemos en nuestro día a día, que hay otros «pájaros» que en nada se parecen al tuyo ni al PÁJARO PABLO, esa bellísima metáfora de PABLO NERUDA…
También hay pájaros, y a las pruebas me remito que:
que son aves , como mínimo de dos plumas,
que en vez de volar renquean de forma oscura…
y sus trinos ahuyentan y son siempre confunsos,
y sólo se les pueden ver alas desplumadas
porque bajo ellas esconden la cabeza…y también sus miserias
pajarracos que …pretenden e intentean que a otros
los árboles le impidan disfrutar de la frescura del bosque.
Hola, lola,
todos conocemos , por desgracia ese tipo de pájaros que hablas…
hay pajaritos y hay pajarracos.
Hoy hablamos de los pájaros que anidan en las emociones de las personas,
que buscan cobijo en las noches frías, en los momentos de necesidad.
Gracias por tus palabras.
Y de esos pajarracos de espeso plumaje, pico destrozador, y que en vez de volar
se rastréan, mejor alejados de ellos.
Un beso
Jussti
Precioso poema. No importa qu sea o no el mismo pájaro cada año, lo importante son los sentimientos y emociones que provoca en quien lo recibe o acoge en su alero, pajar o cocina…
Todo ser busca el calor en invierno, la buena acogida en todo momento, la mano tendida…
Cuántos «pajaros» abandonados necesitan de nuestro calor, acogida, sentimientos, generosidad… algunos vuelan desde muy lejos, otros los tenemos muy cerquita, en el barrio..
Démosles al menos calor.
Saludos
Hola Manolo,
me encanta entres comentando…
tus palabras penetran dentro de las guaridas de esos pájaros,
de las emociones que duermen en los inviernos.
Sin duda, en alguna rama de un arbol, tuvimos clases compartidas…
y sentimos la misma brisa de mar entre mareas altas y bajas !y eso se nota!
Hablamos de pájaros pero hablamos de nosotros,
Y es que, a duras penas conocemos el canto de los pájaros, vecinos nuestros.
De niños, los pájaros -sentimientos- fueron objeto de tiro, piedra o escopeta,
hasta nos contaron que de guerras vecinales. Y poco más nos dijeron,
el resto lo aprendimos sólos.
Lo del respeto a la naturaleza vino más tarde.
Sabemos ahora más que antes,
intentamos descifrar el cantar del mal agüero del cuco,
y las melodías deliciosas del jilguero…,
la vida es un bosque, una calle, una plaza, una selva,
y se escuchan todas las canciones, unas limpias, otras desafinadas.
Por eso hablamos de pájaros,
y más ahora en invierno que buscan alero.
Abrazos
Un agradable y tierno texto el que acabo de leer, y que me lleva, no sé si con alas o no, a mi casa del pueblo en época de primavera cuando las golondrionas anidaban debajo de los aleros. ¡Qué alegría verlas surcar el cielo! ¡Cuánta compañía nos brindaban!
Me encanta pasear y ver en el cielo bandadas de pájaros, me entusiasma contemplarlos en el parque acudiendo a las fuentes a beber en silencio. Y qué tristeza produce cuando un día te das cuentas de que ya no están hasta la nueva primavera.
Los pájaros son una alegría.
Un abrazo, Justi.
Tanto tu comerntario como las fotos que dejas me recuerdan a los años de vida en el pueblo, cuando llegada lam primavera nos empezaban a visitar las golondrinas que anidaban en los aleros de mi casa. Un símbolo de alegría a la vez que de buen tiempo. Todavía hoy me encanta mirar al cielo y ver como los pájaros lo cruzan sin cesar.
Un placer leer estos renglones.
Un abrazo, Justi.
Las fotos y tus renglones me llevan a rememorar la alegría con la que contemplaba la llegada de las golondrinas a los aleros de mi casa. Todavía hoy me encanta ver los pájaros surcando el cielo con la llegada de los primeros calores. Y después de esta larga invernía deseo con ansiedad la llegada de los primeros pájaros, señal de bonanza climatológica.
Un placer leer aquí.
Un abazo, amigo Justi.
Maravillosos renglones los que dejas aquí escritos que a la vez me recuerdan la llegada de las golondrinas a los aleros de mi casa en aquellas primaveras en el pueblo, algo inolvidable.
Un abrazo, Justi.
Qué lindo, Justin. las fotos so una preciosidad y tu prosa…¿ que decirte que no sepas?…
No me has avisado del cambio de avtar y no te encontraba.
Un abrazo.
Hola, Carildul, ¿no me encontrabas?
estaría camuflado como esos pájaros de la foto
que en la noche parecen hojas, parecen sombras.
Pero con la luz de la mañana… diste con mi avatar.
Y es rojo, como un sol rojo.
Gracias por tus palabras,
y por tus abrazos.
Ahí vuelan los míos…
A ver si de esta me queda el comentario escrito, espero que sí.
Al leer tus renglones me recordaban la la llegada de las golondrinas a los alertos de mi casa cada primavera. Y qué alegría verlas surcar el cielo de un lado a otro.Me gusta sentir lo pájaros revolotear entre las ramas de los árboles cuando se recogen al atardecer, con ese sol de poniente q
Amigo justi, sigo el comentario aquí. Quería acabar conesa estampa de los pájaros con el sol de poniente de fondo, una preciosa postal que la naturaleza nos otorga.
Un abrazo, amigo.
Hola, Fernando,
al fin he podido ver tus comentarios, todos.
Me sabe mal, pero son cosas que pasan en este mundo virutal.
Ahí estaban, junto a otros, también ocultos (vete a saber cómo ha podido suceder…)
Lo bueno es que no se hayan perdido.
Gracias por traer aquí tus recuerdos de infancia.
Pájaros y golondrinas formaban parte del entorno rural donde crecimos los de pueblo.
Por tu blog sé que siempre tienes presente aquellas estampas
que viviste en tus años de niño-joven.
Buen recurso para la escritura,para expresar los sentimientos que perduran.
Gracias, nos seguiremos comentando.
Un abrazo.
Hola Justi,
cuántas emociones nos haces sentir con este relato, casi he visualizado esos pasos silencios que dabáis en la semioscuridad por no espantar al pájaro, ese’inquilino’ anual que siempre os visita anunciando la primavera… buscando el calor del hogar y de esa agradable temperatura que debe encontar en vuestra tubería.
Me has hecho sonreír imaginándo tu resbalón del año pasado por no enceder la luz…
Le imagino en estos momentos protegido del viento y acurrucada su cabeza entre su plumaje como suelen dormir…
A mí también me anidan todos los años en el pared de la cocina (en el hueco de la rejilla)
No sé cómo se meten, pero un año que tuve que abrirlo, me quedé impresionada de todo lo que con su pequeño pico pueden traer hasta allí…
Hola Pilar,
gracias por tu comentario.
Aquí donde vivo estamos rodeados de pájaros también, y muy diversos,
en vuelos y trinos,
alborotan alegremente.
En primavera y verano cantan de noche,
De mañana dialogan en lenguajes que no entiendo.
En Otoño vienen a desgranar las semillas de los girasoles
que cultivo para ellos, a compartir nuestra mesa.
Y en invierno, en las noches más frías,
por aquí aparecen buscando el calor de las tuberías de la calefacción,
a compartir nuestro calor.
Su presencia es un mensaje de paz,
como el rocío de las madrugadas,
una siembra colorida de plumas…
!Que no nos falten!
Un beso
Su presencia es un mensaje de paz…
Bonita frase Justi, como las que has dejado en mi blog…
Me alegra haber coincidido.
Gracias por tu visita, y estoy contigo… ¡Qué no nos falten!
En esta ocasión, ¡un beso con alas!
Buenas noches de nuevo, Justi.
Pilar
Las jaulas son alas que nunca nacieron y por eso son prisiones donde ha de dormir el otro, la otra mitad de cada quien. Pájaros en la noche tiene el dulce aroma existencialista en el que te desenvuelves con destreza.
Me gusta tu blog Justi, he estado aquí más veces de las que imaginas…
La llegada de los pájaros con la primavera es símbolo de alegría y de la llegada del buen tiempo. Las imágenes que nos dejas me devuelven a la mente cuando las golondrinas volvían a sus nidos en los aleros del tejado de mi casa. Me sigue gustando verlos surcar el cielo y cobijarse en los árboles al atardecer. Bonitos renglones los que nos dejas.
Un abrazo, Justi.
Hola, Rosa,
sí que ha llegado tu comentario,
y como siempre,
envuelto entre palabras de color:
una, dos, tres, veinte y más palabras crecientes,
palabras que estallan de día, en vuelo, como bengalas,
y en la noche duermen, como pájaros, en las ramas,
como niños en los brazos que los retienen…
Gracias.
Como puedes ver, Rosa, tus comentarios llegaron,
pero permanecieron ocultos no sé porqué motivo.
Ya etán visibles.
Aquí están, en su sitio, palabras que unen a pesar de la distancia.
Gracias por pasearte por aquí.
Me alegra hayas reiniciado tus publicaciones de nuevo,
un placer leerte, y contemplar tu especial arte para la pintura.
Un abrazo.
Justi, bello escrito. Parece que con él ya llegó el buen tiempo y un poquito de calor; nos trae además la fiesta de los colores florales, la transformación del paisaje, la música de los ríos que bajan más cargados que antaño, la luz, que clarea más temprano el día y lejana està la noche.
Bienvenida sea la primavera que nos prolonga el día y las horas de luz.
Feliz semana.
Justi, mis comentarios son como los pájaros que buscan su nido y no lo encuentran. Venía a leerte la respuesta y a seguir leyéndote y veo que el escrito ha debido migrar. Ahora no recuerdo exactamente la composición que te dejé; pero en el texto loaba tu escrito y las fotos que tímidamente mostraban el pico y los ojillos vivaces de los pájaros. Te escribo otra, también al vuelo:
Deja que sus alas
Desplieguen la noche
Aciaga de lunas
De escarcha y luceros.
Deja que sus alas
Desplieguen la vida
Cada amanecer
Cada nuevo día.
Deja que de nuevo
Recorra el alero
Busque protección
Calor y silencio.
Deja que el invierno
Abandone el cielo
Para recorrernos
Senderos y pueblos.
Cosas del invierno, Paco.
Tus comentarios, como pájaaros en vuelo y como bien dices habían migrado,
pero no muy lejos,
pues han vuelto ya.
No sé donde trasnocharon para ya están en su jaula de palabra.
Gracias por tu evocación a la ya cercana primavera, a pesar de que este invierno
se nos presenta largo, lluviosos y muy nevado.
Gracias por el poema:
Deja que sus alas
Desplieguen la vida
Cada amanecer
Cada nuevo día.
Así hemos de hacer, volar…en cada nuevo día.
Un abrazo.
Justi
Cuando se tiene un corazón tan grande como el tuyo, Justi,
es normal que los pájaros acudan a tus brazos,
brazos que toman la forma de tubería de calefacción
para que se calienten,
de laurel, para que ojeen el mundo de alrededor
o de girasol, para que se alimenten.
Este año ser alargará la estancia del pajarillo,
el invierno está siendo duro
y necesitará abrigarse en el calor de tu casa…
¡cuídalo bien!
Te dejo un bonito poema de Gloria Fuertes…
«Los pájaros anidan en mis brazos,
en mis hombros, detrás de mis rodillas,
entre los senos tengo codornices,
los pájaros se creen que soy un árbol.
Una fuente se creen que soy los cisnes,
bajan y beben todos cuando hablo,
las ovejas me pisan cuando pasan,
y comen en mis dedos los gorriones;
se creen que soy tierra las hormigas
y los hombres se creen que no soy nada»
Gracias ZarLinda
por el poema que me dejas de Gloria Fuertes,
poeta de lo cotidiano, de lo rozamos, vemos y sentimos,
«se creen que soy tierra las hormigas
y los hombres se creen que no soy nada»
En cuanto a mis brazos… !bueno! más cómodos están los pájaros
en las ramas del laurel. Allí cantan, otéan el paisaje, cazan insectos.
En mis brazos…, calor y poco más,
y para calor ya les permito que pasen mejor las noches frías en las
tuberías de la calefacción.
Ya estoy preparando el semillero para plantar pronto los girasoles.
Allá por el otoño cuando hayan madurado, sus pipas serán el banquete
más preciado. Y ellos lo saben y lo esperan.Cada año vienen más y más. Esto parece ya un albergue del camino de Santiago.
Los peregrinos son los pájaros. Yo soy el hostelero.
Gracias por tus palabras,
besos.
Justi, Ya te he enviado un par de comentarios que me apetecían, pero, la verdad, no sé si te habrán llegado. Como tienes este laberinto que tienes………Quería agradecerte el repaso que has hecho a mis trabajos y los comentarios que has dejado en ellos. Me parecen lúcidos, entrañables y estimulantes. A pesar de que me pierdo un poco en tu forma de presentarte, mi determinación es leerte y me comprometo a ello para intercambiar aportaciones. Concretamente me parece rico, sugerente y que te recreas en la vivencia que describes y, al hacerlo, transmites el gozo y el descubrimiento que ha significado para tí. Te felicito. Seguramente tendré que preguntarte de vez en cuando alguna observación técnica porque me siento torpe en este mundo.Un abrazo
Pue sí, Antonio, a todos nos ha pasado, nos pasa lo mismo, autodidactas en este mundo bloguero. Nos ha llegado el inventi ya maduros, pero lo sabemos coger entre las manos, por los cuernos como se dice,y lo moldeamos aunque nos cueste. De batallas mayores venimos,
que sobrevivientes somos.
La primera vez que comentas en este blog se ha de aprobar el omentario como he hecho,
las veces siguientes si pones el mismo correo ya no hará falta.
Como ves, las palabras llegan, unas veces en tren, otras a lomo de una nube de lluvia
como hoy, otras al abrigo del vuelo de los pájaros como en este post, pero llegan.
A todos nos cuesta dominar los medios, pero lo conseguiremos.
Un abrazo, y gracias por meterte en el sentimiento de este blog.
Si no compartimos lo que sentimos, ¿para qué vivir?
Justi
¿Quien soy yo?
soy lo que me ocurre y siento,
azul,
rojo,
espacio,
a veces niño y luego sentimiento,
aroma de lejanos tiempos...
La mañana es clara
y el amor pasa
todas las tardes ante mi casa.
Soñando,
esperando,
asomado a la ventana estoy
Justi
callar...gritar...siempre por mantener la justicia ante nuevos vendavales...Esos somos nosotros, los que resistimos como robles tras las curvas del sendero
de la vida...
moldeando la luz…la imagen y mi palabra
Historia de nuestras palabras: mis relatos
El Caballero
CABALLERO DERROTADO,
HAZME SITIO EN TU MONTURA,
QUE YO TAMBIÉN VOY CARGADO
DE AMARGURA...
(leon felipe)
Traje regional de Zamora -CARBAJALES-
ARTE, COLORIDO, ESTALLIDO DE SENTIDOS
EN EL TRAJE REGIONAL DE CARBAJALES-
Aguas del Duero-los arribes-
Nube
blanca,
que vas tan sóla en el cielo
y tan alta,
junto a la luna de plata
vendrás a parar
mañana,
igual que mi amor,
en agua.
En agua de mar
honda y clara.
(León Felipe)
leon felipe -monumento en Zamora-
PIEDRAS SAGRADAS
Con las piedras sagradas
de los templos caídos
grava menuda hicieron
los martillos
largos
de los picapedreros analíticos.
Después,
sobre esta grava, se ha vertido
el asfalto negro y viscoso
de los pesimismos.
Y ahora... Ahora, con esta mezcla extraña,
se han abierto calzadas y caminos
por donde el cascabel de la esperanza
acelera su ritmo.
(Poema de León Felipe)
puente del Esla
Tú, viejo Duero, sonríes
entre tus barbas de plata,
moliendo con tus romances
las cosechas mal logradas.
Y entre los santos de piedra
y los álamos de magia
pasas llevando en tus ondas
palabras de amor, palabras.
santovenia del esla
MI PUEBLO
Un pueblo entre campos,
pequeño,
casas llenas de hermanos,
una torre de iglesia, alta,
y muchos tejados rojos,
bajos.
Un rio,
encinas,
una pradera para el ganado,
flores,
niños por las calles,
los sembrados...
Gentes que abren surcos en la tierra
mientras miran a lo alto
a ver si llueve.
SANTOVENIA DEL ESLA es
MI PUEBLO.
Me ha emocionado¡¡¡es tan dulce y humano tu amor por el pájaro…¡¡¡
y es tan, dulce y humano el amor del pájaro por tí…¡¡¡
Un abrazo con alas de pájaro…¡ me gustaría ser pájaro…..¡
El pájaro, amiga Montse,
es ruiseñor, gorrión, jilguero…
quizá también es emoción;
las noches de más frío viene,
a veces se espanta por los ladridos de la perra,
o por la luz que se enciende…
pero a la noche siguiente, vuelve,
pues aquí tiene calor.
Abrazos
(Dejo POP, tu comentario):
«Querido hermano poeta Justi,
este es un post maravilloso
que nos trae la primavera.
Sabes querido amigo?, una de las cosas que me gusta de
China es que el año nuevo se celebra siguiendo el calendario lunar.
El proximo 14 de febrero se celebra la entrada del año,
que coincide basicamente con la primavera, pues aqui ya empiezo
a ver tambien
a los pajaricos que vuelven.
En mi opinión, el poeta es la voz de los pajaros en la tierra,
nosotros no tenemos alas, por eso le damos las palabras.
Un beso y feliz primavera,
Popochan.
———[ 받은 메일 내용 ]———-
제목 : Hola
날짜 : 2010년 2월 09일 화요일, 오후 21시 46분 49초 +0900
Hola Pop,
supongo que preparando ya la fiesta del Nuevo Año Chino.
Aquí, para la primavera,
todavía quedan unas cuantas heladas,
vientos
y lluvias frías.
Como dice la poesía china:
«En las noches de primavera
no se advierte el alba.
Hasta que por doquier resuena
el reclamo de las aves.
Pero anoche oí el estruendo
del viento y la lluvia
Y me pregunté: ¿cuántos tallos de rosas
se habrán dañado?»
Gracias por tus palabras.
Un abrazo, y feliz año.
Justi
qué sensibilidad demuestras hacia los animales…hacia ese pájaro que año tras año regresa a casa..al calor del hogar en donde sabe que será bien recibido y que no pasará frío. Es como la golondrina, que año tras año vuelve a realizar un nido bajo el alero de las casas…Es cierto que no sabemos a ciencia cierta, o no lo vemos, en dónde duermen los pájaros…en mi casa…lo hacen en la cochera y se comen el pienso del perro…así que cada mañana les pongo de gato, que es más pequeño…y mejor de llevar…Somos aves, que emigramos a otros lugares…pero casi siempre regresamos al lugar en donde se nos trata con cariño…un besito
Bonitas palabras, Águeda,
somos pájaros, y somos aire
y somos montaña, depende de la mirada…
Me has hecho recordar cuando años atrás teníamos el pastor alemán fuera, y alrededor de su pienso había siempre un grupito de gorriones…y demás bichejos. Había concordia y reparto entre ellos…siempre cada uno a su horario; !buena gente!
La verdad que sí, que el relato va de pájaros y de emociones que buscan donde pasar la noche de los inviernos hasta que sus cantos y alas desplieguen la primavera. Que nunca falte el calor.
Un abrazo.
Preciosas tus palabras Justi, palabras rebosantes de sensaciones, de emociones de buenos sentimientos, bellas y cálidas. Tan cálidas como la tubería donde se protege el gorrión.
Sin calor no hay vida, ¿verdad, poeta?
Un beso grande.
La verdad, Carmen, que parece gorrión. Tampoco lo he podido mirar de frente, al resplandor de la linterna, pues se iría como sucede a menudo.
(Tampoco es mi fuerte el dominio de este tema de los pájaros, otra asignatura pendiente.)
De noche se le ve rechoncho, con el pico grueso adaptado para comer en estos terrenos de montaña. Los colores de las plunas parecen grises y marrones.
A veces viene otro, más estilizado, que no sé si será gorrión o de otra especie o pueblo. Tendré que investigar…
Y como sin calor no hay vida, quizá por eso vienen cuando hace más frío hasta las tuberías de la calefacción, donde se posan para pasar las noches.
En noches más cálidas no vienen, tendrán otros balnearios…
Vaya disertación estoy dando, ni que fuera yo entendido en pajaritos…
Pero me encanta que en cada invierno vengan a compartir nuestro calor.
Y que yo sepa, estamos hablando de emociones cuando estamos hablando de gorriones.
Gracias por tus pálabras, y ciertamente como dices:
SIN CALOR NO HAY VIDA.
Besos.
Cada una de las frases me provoca una imagen.
Mi casa no es una casa solitaria, conmigo habitan aquí muchos pájaros, gorriones sobre todo, han anidado en la cuadra y cada mañana salen a picotear las plantas y a robarle el pienso al chucho que corre tras ellos ladrando, como si de un juego se tratara, porque, otras veces, los deja comer de su plato mientras domita.
Dejaremos una ventana abierta siempre para que entren nuevas emociones y tendremos preparadas unas risas para alimentarlas.
Un abrazo, amigo.
!Vaya! todos estamos rodeados de pájaros, gorriones, jilgueros…
amiga Gloria.
Con ellos vienen y revolotean las emociones, entre cuyas alas se enredan .
Como bien dices, abramos puertas, abramos ventanas,
y que entre la naturaleza…
«Bajan de nueva cuenta hasta el jardín,
bajan en grupo, solos, en parejas
en busca de semillas o de pan,
de agua fresca, de frutos o de insectos
pero los amilana una mirada.
Siguiendo los atávicos auspicios
de su naturaleza, los gorriones
alzan el vuelo y tímidos se posan
en los cables de luz como si fueran
las notas de un pentagrama.» (Alberto Blanco)
Un abrazo.
Me ha alegrado tu comentario, y al oscurecer,
la hora en la que viene el gorrión cada noche buscando ese hueco que has visto en la foto. (Me costó sacarla sin que se fuera. Es esquivo a la luz del flasch,
a las miradas como dice el poeta).
Justi
“Es invierno, llueve y hace frío; él es libre,
pero sólo aquí siente el calor”
dicen que los pájaros llevan una herencia genética
que hace volver a sus descendientes
al mismo sitio…
como ese pájaro que te visita año tras año…
que recuerda el calor bajo el alero
en las frías noches de invierno.
Es como la ilusión que se renueva cada año,
que anida en los corazones cálidos
y le cuesta irse…
que cuando flaquea
vuelve buscando el calor,
quizá porque la libertad no es importante
sin una emoción, sin un sueño,
como tú dices en este lindo poema…
Tantos pájaros que nos buscan…
que esperan el desayuno por las mañanas,
a mi me vienen a primera hora, y hasta entran en la cocina
entre trinos y revoloteos de ramas todavía en sus alas,
comen migajas que les doy…
luego se van y siempre vuelven…cada mamana.
Son esos sueños
que llenan nuestras noches…
que se acurrucan en nuestro corazón,
que van y vienen,
mezclándose con realidades…
¡Qué bonita historia, Justi!
los pájaros anidan donde encuentran una sonrisa…
en forma de calor y alimento…
Un abrazo.
Estrella
Pues será lo de la herencia genética…
Gracias por la aclaración, Estrella.
El caso es que desde hace años sigue posando,
en las noches de invierno, y en ese lugar, el mismo pájaro (el mismo o mejor dicho su heredero genético)
Bonitas palabras las tuyas, que siguen en el mismo vuelo del texto.
Son estampas típicas del invierno.
Esto es montaña baja, húmeda, hay el cauce de un arroyo.
Y muchos pinos…
Los pájaros grandes, las urracas, las torcaces, vuelan lejos,
pero los pequeños gorriones, tan débiles como tiernos,
cuando llega el atardecer buscan refugio en los árboles más cercanos a la casa, lejos de la carretera y de la curva del arroyo.
En esa hora crepuscular, en el laurel hay cantos y bailes de plumas,
la noche penetra entre las ramas, (también el frío),
y siempre el mismo pájaro que busca la tubería de la calefacción
para dormir. Prefiere sentir el espacio de una casa, alejado de los suyos,
sentir sus emociones entre paredes blancas y cálidas.
Es la escena de cada noche fría, y este año hay muchas…
Es buen augurio, pues como digo en el texto, en sus plumas anida la primavera
que luego, ya en marzo, brotará en rosales.
Gracias por tus palabras, veo por lo que dices que también
te visitan. Que no les falten migajas de pan en tu cocina, o en tu mano.
Te traerán coloridas primaveras…
Besos
Hola Justi, el texto no puede ser más bello…
sí que está cargado de poesía…de emociones…de imaginación…
Los poetas sois la releche…
Menos mal que Zar apunta por ahí una idea más lógica…porque eso de que todos los años es el mismo pájaro…jejeje…
Me gusta mucho la métafora. Caro que sí. Todos, gorriones y personas, acudimos al “calor” que calienta las tuberias y…al calor humano en sus diversas manifestaciones…
Un beso.
!vaya!… Otro comentario que me da caña con lo del MISMO pájaro…
Gracias, Lola, por tus amistosas palabras.
La verdad que no soy experto en Pajarería, tampoco en temas de Reencarnación, pero seguro que debe ser así como decís, aunque poéticamente queda más bonito eso de:
mismo tejado,
mismo alero,
mismo techado,
misma casa
y un mismo pájaro…
(Es proverbial la tendencia que tienen los malos poetas-yo no llego ni a eso- a desfigurar la realidad)
Así que…!vale! admitido científicamente que será otro gorrión,
pero para mi será el mismo gorrión,
sempiterno y lastimero gorrión…
símbolo de la necesidad de la comunicación que todos tenemos en las noches de invierno.
Un beso.
Justi
Lo importante es como tu lo veas, y como gran poeta que eres lo «ves así»…Rafael Alberti los ve en el mar…
A fin de cuentas Justi, lo importante es «volar»….
A volar
Leñador,
no tales el pino,
que un hogar
hay dormido
en su copa.
—Señora abubilla,
señor gorrión,
hermana mía calandria,
sobrina del ruiseñor;
ave sin cola,
martín-pescador,
parado y triste alcaraván:
¡a volar,
pajaritos,
al mar!
De: Marinero en tierra
RAFAEL ALBERTI
Bonita esa canción marinera de nuestro admirado Alberti.
Gracias, Lola.
Yo pondré esta otra de Pablo Neruda, titulada… PÁJARO PABLO:
«ME llamo pájaro Pablo,
ave de una sola pluma,
volador de sombra clara
y de claridad confusa,
las alas no se me ven,
los oídos me retumban
cuando paso entre los árboles
o debajo de las tumbas
cual un funesto paraguas
o como una espada desnuda,
estirado como un arco
o redondo como una uva,
vuelo y vuelo sin saber,
herido en la noche oscura,
quiénes me van a esperar,
quiénes no quieren mi canto,
quiénes me quieren morir,
quiénes no saben que llego
y no vendran a vencerme,
a sangrarme, a retorcerme
o a besar mi traje roto
por el silbido del viento.
Por eso vuelvo y me voy,
vuelo y no vuelo pero canto:
soy el pájaro furioso
de la tempestad tranquila.»
Al final, la metáfora del pájaro… vuela
y se cobija en cada uno de nosotros.
Un abrazo.
Justi
Pues si Justi, todos pudimos comprobar alguna vez y lo hacemos en nuestro día a día, que hay otros «pájaros» que en nada se parecen al tuyo ni al PÁJARO PABLO, esa bellísima metáfora de PABLO NERUDA…
También hay pájaros, y a las pruebas me remito que:
que son aves , como mínimo de dos plumas,
que en vez de volar renquean de forma oscura…
y sus trinos ahuyentan y son siempre confunsos,
y sólo se les pueden ver alas desplumadas
porque bajo ellas esconden la cabeza…y también sus miserias
pajarracos que …pretenden e intentean que a otros
los árboles le impidan disfrutar de la frescura del bosque.
un beso lola
Hola, lola,
todos conocemos , por desgracia ese tipo de pájaros que hablas…
hay pajaritos y hay pajarracos.
Hoy hablamos de los pájaros que anidan en las emociones de las personas,
que buscan cobijo en las noches frías, en los momentos de necesidad.
Gracias por tus palabras.
Y de esos pajarracos de espeso plumaje, pico destrozador, y que en vez de volar
se rastréan, mejor alejados de ellos.
Un beso
Jussti
Precioso poema. No importa qu sea o no el mismo pájaro cada año, lo importante son los sentimientos y emociones que provoca en quien lo recibe o acoge en su alero, pajar o cocina…
Todo ser busca el calor en invierno, la buena acogida en todo momento, la mano tendida…
Cuántos «pajaros» abandonados necesitan de nuestro calor, acogida, sentimientos, generosidad… algunos vuelan desde muy lejos, otros los tenemos muy cerquita, en el barrio..
Démosles al menos calor.
Saludos
Hola Manolo,
me encanta entres comentando…
tus palabras penetran dentro de las guaridas de esos pájaros,
de las emociones que duermen en los inviernos.
Sin duda, en alguna rama de un arbol, tuvimos clases compartidas…
y sentimos la misma brisa de mar entre mareas altas y bajas !y eso se nota!
Hablamos de pájaros pero hablamos de nosotros,
Y es que, a duras penas conocemos el canto de los pájaros, vecinos nuestros.
De niños, los pájaros -sentimientos- fueron objeto de tiro, piedra o escopeta,
hasta nos contaron que de guerras vecinales. Y poco más nos dijeron,
el resto lo aprendimos sólos.
Lo del respeto a la naturaleza vino más tarde.
Sabemos ahora más que antes,
intentamos descifrar el cantar del mal agüero del cuco,
y las melodías deliciosas del jilguero…,
la vida es un bosque, una calle, una plaza, una selva,
y se escuchan todas las canciones, unas limpias, otras desafinadas.
Por eso hablamos de pájaros,
y más ahora en invierno que buscan alero.
Abrazos
Un agradable y tierno texto el que acabo de leer, y que me lleva, no sé si con alas o no, a mi casa del pueblo en época de primavera cuando las golondrionas anidaban debajo de los aleros. ¡Qué alegría verlas surcar el cielo! ¡Cuánta compañía nos brindaban!
Me encanta pasear y ver en el cielo bandadas de pájaros, me entusiasma contemplarlos en el parque acudiendo a las fuentes a beber en silencio. Y qué tristeza produce cuando un día te das cuentas de que ya no están hasta la nueva primavera.
Los pájaros son una alegría.
Un abrazo, Justi.
Tanto tu comerntario como las fotos que dejas me recuerdan a los años de vida en el pueblo, cuando llegada lam primavera nos empezaban a visitar las golondrinas que anidaban en los aleros de mi casa. Un símbolo de alegría a la vez que de buen tiempo. Todavía hoy me encanta mirar al cielo y ver como los pájaros lo cruzan sin cesar.
Un placer leer estos renglones.
Un abrazo, Justi.
Las fotos y tus renglones me llevan a rememorar la alegría con la que contemplaba la llegada de las golondrinas a los aleros de mi casa. Todavía hoy me encanta ver los pájaros surcando el cielo con la llegada de los primeros calores. Y después de esta larga invernía deseo con ansiedad la llegada de los primeros pájaros, señal de bonanza climatológica.
Un placer leer aquí.
Un abazo, amigo Justi.
Maravillosos renglones los que dejas aquí escritos que a la vez me recuerdan la llegada de las golondrinas a los aleros de mi casa en aquellas primaveras en el pueblo, algo inolvidable.
Un abrazo, Justi.
Qué lindo, Justin. las fotos so una preciosidad y tu prosa…¿ que decirte que no sepas?…
No me has avisado del cambio de avtar y no te encontraba.
Un abrazo.
Hola, Carildul, ¿no me encontrabas?
estaría camuflado como esos pájaros de la foto
que en la noche parecen hojas, parecen sombras.
Pero con la luz de la mañana… diste con mi avatar.
Y es rojo, como un sol rojo.
Gracias por tus palabras,
y por tus abrazos.
Ahí vuelan los míos…
A ver si de esta me queda el comentario escrito, espero que sí.
Al leer tus renglones me recordaban la la llegada de las golondrinas a los alertos de mi casa cada primavera. Y qué alegría verlas surcar el cielo de un lado a otro.Me gusta sentir lo pájaros revolotear entre las ramas de los árboles cuando se recogen al atardecer, con ese sol de poniente q
Amigo justi, sigo el comentario aquí. Quería acabar conesa estampa de los pájaros con el sol de poniente de fondo, una preciosa postal que la naturaleza nos otorga.
Un abrazo, amigo.
Hola, Fernando,
al fin he podido ver tus comentarios, todos.
Me sabe mal, pero son cosas que pasan en este mundo virutal.
Ahí estaban, junto a otros, también ocultos (vete a saber cómo ha podido suceder…)
Lo bueno es que no se hayan perdido.
Gracias por traer aquí tus recuerdos de infancia.
Pájaros y golondrinas formaban parte del entorno rural donde crecimos los de pueblo.
Por tu blog sé que siempre tienes presente aquellas estampas
que viviste en tus años de niño-joven.
Buen recurso para la escritura,para expresar los sentimientos que perduran.
Gracias, nos seguiremos comentando.
Un abrazo.
Hola Justi,
cuántas emociones nos haces sentir con este relato, casi he visualizado esos pasos silencios que dabáis en la semioscuridad por no espantar al pájaro, ese’inquilino’ anual que siempre os visita anunciando la primavera… buscando el calor del hogar y de esa agradable temperatura que debe encontar en vuestra tubería.
Me has hecho sonreír imaginándo tu resbalón del año pasado por no enceder la luz…
Le imagino en estos momentos protegido del viento y acurrucada su cabeza entre su plumaje como suelen dormir…
A mí también me anidan todos los años en el pared de la cocina (en el hueco de la rejilla)
No sé cómo se meten, pero un año que tuve que abrirlo, me quedé impresionada de todo lo que con su pequeño pico pueden traer hasta allí…
Buenas noches Justi.
Un beso fuerte.
Pilar
Hola Pilar,
gracias por tu comentario.
Aquí donde vivo estamos rodeados de pájaros también, y muy diversos,
en vuelos y trinos,
alborotan alegremente.
En primavera y verano cantan de noche,
De mañana dialogan en lenguajes que no entiendo.
En Otoño vienen a desgranar las semillas de los girasoles
que cultivo para ellos, a compartir nuestra mesa.
Y en invierno, en las noches más frías,
por aquí aparecen buscando el calor de las tuberías de la calefacción,
a compartir nuestro calor.
Su presencia es un mensaje de paz,
como el rocío de las madrugadas,
una siembra colorida de plumas…
!Que no nos falten!
Un beso
Su presencia es un mensaje de paz…
Bonita frase Justi, como las que has dejado en mi blog…
Me alegra haber coincidido.
Gracias por tu visita, y estoy contigo… ¡Qué no nos falten!
En esta ocasión, ¡un beso con alas!
Buenas noches de nuevo, Justi.
Pilar
Las jaulas son alas que nunca nacieron y por eso son prisiones donde ha de dormir el otro, la otra mitad de cada quien. Pájaros en la noche tiene el dulce aroma existencialista en el que te desenvuelves con destreza.
Me gusta tu blog Justi, he estado aquí más veces de las que imaginas…
Saludo aleteando cariño.
Rosa.
La llegada de los pájaros con la primavera es símbolo de alegría y de la llegada del buen tiempo. Las imágenes que nos dejas me devuelven a la mente cuando las golondrinas volvían a sus nidos en los aleros del tejado de mi casa. Me sigue gustando verlos surcar el cielo y cobijarse en los árboles al atardecer. Bonitos renglones los que nos dejas.
Un abrazo, Justi.
Hola, Rosa,
sí que ha llegado tu comentario,
y como siempre,
envuelto entre palabras de color:
una, dos, tres, veinte y más palabras crecientes,
palabras que estallan de día, en vuelo, como bengalas,
y en la noche duermen, como pájaros, en las ramas,
como niños en los brazos que los retienen…
Gracias.
Que las palabras nos abrasen con su calor en vez de dejarnos temblorosos de soledad en medio de la estepa de nuestras emociones.
Buen amanecer Justi.
Abrazo que vuela.
Rosa.
Como puedes ver, Rosa, tus comentarios llegaron,
pero permanecieron ocultos no sé porqué motivo.
Ya etán visibles.
Aquí están, en su sitio, palabras que unen a pesar de la distancia.
Gracias por pasearte por aquí.
Me alegra hayas reiniciado tus publicaciones de nuevo,
un placer leerte, y contemplar tu especial arte para la pintura.
Un abrazo.
Gracias a todos;
por vuestra lectura
y por vuestros comentarios-
Justi
Justi, bello escrito. Parece que con él ya llegó el buen tiempo y un poquito de calor; nos trae además la fiesta de los colores florales, la transformación del paisaje, la música de los ríos que bajan más cargados que antaño, la luz, que clarea más temprano el día y lejana està la noche.
Bienvenida sea la primavera que nos prolonga el día y las horas de luz.
Feliz semana.
Justi, mis comentarios son como los pájaros que buscan su nido y no lo encuentran. Venía a leerte la respuesta y a seguir leyéndote y veo que el escrito ha debido migrar. Ahora no recuerdo exactamente la composición que te dejé; pero en el texto loaba tu escrito y las fotos que tímidamente mostraban el pico y los ojillos vivaces de los pájaros. Te escribo otra, también al vuelo:
Deja que sus alas
Desplieguen la noche
Aciaga de lunas
De escarcha y luceros.
Deja que sus alas
Desplieguen la vida
Cada amanecer
Cada nuevo día.
Deja que de nuevo
Recorra el alero
Busque protección
Calor y silencio.
Deja que el invierno
Abandone el cielo
Para recorrernos
Senderos y pueblos.
Cosas del invierno, Paco.
Tus comentarios, como pájaaros en vuelo y como bien dices habían migrado,
pero no muy lejos,
pues han vuelto ya.
No sé donde trasnocharon para ya están en su jaula de palabra.
Gracias por tu evocación a la ya cercana primavera, a pesar de que este invierno
se nos presenta largo, lluviosos y muy nevado.
Gracias por el poema:
Deja que sus alas
Desplieguen la vida
Cada amanecer
Cada nuevo día.
Así hemos de hacer, volar…en cada nuevo día.
Un abrazo.
Justi
Cuando se tiene un corazón tan grande como el tuyo, Justi,
es normal que los pájaros acudan a tus brazos,
brazos que toman la forma de tubería de calefacción
para que se calienten,
de laurel, para que ojeen el mundo de alrededor
o de girasol, para que se alimenten.
Este año ser alargará la estancia del pajarillo,
el invierno está siendo duro
y necesitará abrigarse en el calor de tu casa…
¡cuídalo bien!
Te dejo un bonito poema de Gloria Fuertes…
«Los pájaros anidan en mis brazos,
en mis hombros, detrás de mis rodillas,
entre los senos tengo codornices,
los pájaros se creen que soy un árbol.
Una fuente se creen que soy los cisnes,
bajan y beben todos cuando hablo,
las ovejas me pisan cuando pasan,
y comen en mis dedos los gorriones;
se creen que soy tierra las hormigas
y los hombres se creen que no soy nada»
Besos.
Gracias ZarLinda
por el poema que me dejas de Gloria Fuertes,
poeta de lo cotidiano, de lo rozamos, vemos y sentimos,
«se creen que soy tierra las hormigas
y los hombres se creen que no soy nada»
En cuanto a mis brazos… !bueno! más cómodos están los pájaros
en las ramas del laurel. Allí cantan, otéan el paisaje, cazan insectos.
En mis brazos…, calor y poco más,
y para calor ya les permito que pasen mejor las noches frías en las
tuberías de la calefacción.
Ya estoy preparando el semillero para plantar pronto los girasoles.
Allá por el otoño cuando hayan madurado, sus pipas serán el banquete
más preciado. Y ellos lo saben y lo esperan.Cada año vienen más y más. Esto parece ya un albergue del camino de Santiago.
Los peregrinos son los pájaros. Yo soy el hostelero.
Gracias por tus palabras,
besos.
Justi, Ya te he enviado un par de comentarios que me apetecían, pero, la verdad, no sé si te habrán llegado. Como tienes este laberinto que tienes………Quería agradecerte el repaso que has hecho a mis trabajos y los comentarios que has dejado en ellos. Me parecen lúcidos, entrañables y estimulantes. A pesar de que me pierdo un poco en tu forma de presentarte, mi determinación es leerte y me comprometo a ello para intercambiar aportaciones. Concretamente me parece rico, sugerente y que te recreas en la vivencia que describes y, al hacerlo, transmites el gozo y el descubrimiento que ha significado para tí. Te felicito. Seguramente tendré que preguntarte de vez en cuando alguna observación técnica porque me siento torpe en este mundo.Un abrazo
Pue sí, Antonio, a todos nos ha pasado, nos pasa lo mismo, autodidactas en este mundo bloguero. Nos ha llegado el inventi ya maduros, pero lo sabemos coger entre las manos, por los cuernos como se dice,y lo moldeamos aunque nos cueste. De batallas mayores venimos,
que sobrevivientes somos.
La primera vez que comentas en este blog se ha de aprobar el omentario como he hecho,
las veces siguientes si pones el mismo correo ya no hará falta.
Como ves, las palabras llegan, unas veces en tren, otras a lomo de una nube de lluvia
como hoy, otras al abrigo del vuelo de los pájaros como en este post, pero llegan.
A todos nos cuesta dominar los medios, pero lo conseguiremos.
Un abrazo, y gracias por meterte en el sentimiento de este blog.
Si no compartimos lo que sentimos, ¿para qué vivir?
Justi